Respecto del instructivo emanado por el Ministerio de Hacienda y difundido por diversos medios de comunicación, en el cual se instruye a que los servicios públicos no podrán solicitar incrementos de dotación en sus anteproyectos del Presupuesto 2025 cuando su nivel de ausentismo laboral, asociado a licencias médicas no parentales en el año 2023, estuviera por sobre un 30% respecto del mismo dato del año 2018, declaramos lo siguiente:
- El ausentismo por licencias médicas no parentales en el sector público, particularmente en el sector salud, es multifactorial y a la fecha no hay un estudio sistematizado sobre sus causas con el cual se pueda concebir planes adecuados de tratamiento. Sin embargo, la experiencia y el trabajo que desarrollan nuestros dirigentes/as en los comités de ausentismo de cada establecimiento, nos indica que las principales causas son las altas exigencias físicas y emocionales propias del trabajo asistencial. Turnos, manejo de cargas, trabajo con sustancias peligrosas y carcinogénicas son algunas de sus causas, complementadas con una organización del trabajo altamente jerárquica que además ha normalizado el acoso laboral. (Recordar que la Ley Karin toma cuerpo precisamente por el suicidio de una trabajadora de la salud). Debido a lo anterior, en los últimos años, han aumentado vertiginosamente las licencias médicas por problemas de salud mental, sobre todo por el impacto que tuvo la pandemia a la cual hicimos frente como primera línea, contando sólo con el descanso reparatorio como medida de mitigación, iniciativa que nació desde nuestra Federación.
- También se debe considerar la histórica brecha del personal de salud, cuyas plantas están estancadas desde hace casi una década y que se expanden de manera marginal en base a programas ministeriales acotados y empleos precarios a través de honorarios, lo que se contrapone al envejecimiento creciente de la población y el aumento de enfermedades crónicas, lo que complejiza aún más la atención de salud pública. Este problema crónico en el sector, tiene impacto directo en el ausentismo al provocar un acelerado desgaste físico y emocional, situación reconocida por el Ejecutivo en su Programa de Gobierno al proponer un estudio de brecha del personal de salud dentro de sus medidas estrellas.
- Por último, los problemas de seguridad, pues las agresiones han aumentado drásticamente en los últimos años y aquello provoca un aumento en el ausentismo laboral. Este fenómeno no es ajeno al Gobierno actual, pues ha instruido a los Directores de Servicios de Salud y de establecimientos asistenciales de la Región Metropolitana conformar Mesas de Seguridad para abordar la problemática, lamentablemente sin buenos resultados a la fecha.
Por todo lo anterior, resulta indignante e incomprensible que este Gobierno debilite la función pública en el sector salud con el bloqueo de los incrementos de dotación en relación al nivel de ausentismo, pues carga sobre los hombros de las y los trabajadores el peso de un problema estructural, agudizando los mismos factores que lo gatillan. No es de extrañar que esta medida infame produzca más licencias médicas.
Hacemos un llamado a las autoridades a que se comprometan con la salud pública y que de una vez por todas dignifique a las y los trabajadores de la salud, tomando medidas responsables que se traduzcan en reales mejoras de las condiciones laborales y no medidas sancionadoras que solo van en directo perjuicio de la clase trabajadora y de la ciudadanía. Exigimos que se tome medidas que garanticen un trabajo digno y decente con miras hacia la prevención del ausentismo, cumpliendo con sus compromisos: “carrera funcionaria y trabajos libres de violencia”.
Directorio FEDEPRUS Metropolitana